El manuscrito de piedra, de Luis García Jambrina

TÍTULO: El manuscrito de piedra

AUTOR: Luis García Jambrina

FECHA DE PUBLICACIÓN: 20 de enero de 2021

NÚMERO DE PÁGINAS: 325

EDITORIAL: Booket

SAGA: Los manuscritos (1/5)

-Sinopsis-

Salamanca, 1497. Fernando de Rojas, estudiante de Leyes y futuro autor de La Celestina, deberá investigar el asesinato de un catedrático de Teología en una ciudad llena de misterios y conflictos y en una época de gran agitación y cambio. Galardonada con el prestigioso Premio Internacional de Novela Histórica Ciudad de Zaragoza, con esta novela se inician las aventuras del célebre pesquisidor que ha seducido a tantos lectores.

Aulas, conventos, mancebías, tabernas, palacios y antros oscuros… El manuscrito de piedra recorre magistralmente la vida universitaria y los bajos fondos de la Salamanca prerrenacentista a través de las andanzas de su protagonista.

-Mi Opinión-

El manuscrito de piedra comienza relatando el asesinato de uno de los frailes de la Iglesia de Salamanca. Podemos sentir la tensión. Incluso unos oscuros motivos detrás de ese crimen.

Acto seguido, cambiamos a la perspectiva en la que permaneceremos en tercera persona, la de Fernando de Rojas. Tras una detallada descripción de lo que es su pasado, vida y costumbres el hombre acude a la llamada de el Obispo, el cual le exige encontrar al culpable del asesinato antes mencionado. A partir de aquí, la historia comienza bastante prometedora.

Nos encontramos ante una buena ambientación, donde la Iglesia tiene un fuerte poder y rechaza los cambios, las novedades y, prácticamente, todo aquello que produce placer. Los judíos conversos y herederos de estos son injustamente perseguidos y todos estos factores provocarán que Fernando se tope con muchos obstáculos en su investigación. 

Esto, al principio, resulta muy interesante. Pero poco a poco nos vamos dando cuenta de qué ritmo lleva la novela. Nuestro investigador, pese a todo, siempre tiene un hilo muy marcado que seguir y una pista le lleva a la siguiente muy fácilmente. En ocasiones, apenas tiene que hacer nada, pues los datos vienen a él, más para que nosotros encontremos coherencia en la identidad del asesino que para que el famoso personaje adelante en su investigación. Por tanto, la parte de thriller es más bien flojita.

Mientras, la narrativa está sobrecargada de ideas políticas e históricas. El objetivo parece ser relacionar las muertes desde un primer momento con algún tipo de conspiración u odio tocante a la religión. Esto no sólo reduce la calidad del thriller sino que ralentiza mucho la lectura. En más de una conversación con una persona aparentemente clave para la investigación el tema se ha desviado durante párrafos y párrafos, fácilmente reconocibles porque deben retomar el hilo principal con alguna frase estilo "bueno, a lo que íbamos" o incluso "pero volvamos a lo que importa".

Ya sabéis que no soy muy aficionada a las novelas históricas por lo que este exceso de palabrería no me ha gustado nada. Sin embargo, intentando ser objetiva, creo que tampoco hubiera sido de mi agrado si fuera más fanática de este género literario, pues en ocasiones la narración parecía pertenecer más a una enciclopedia que a una novela.

-Puntuación-