El retorno, de Kathryn Taylor

TITULO: El retorno

AUTOR: Kathryn Taylor

FECHA DE PUBLICACIÓN:  2016

NÚMERO DE PÁGINAS: 398

EDITORIAL: B de block

SAGA: Daringham Hall (3/3)

-Sinopsis-
Un regreso esperado, un gran amor y una última esperanza.
Ben Sterling hubiera querido que las cosas sucedieran de otro modo. Pues, desde que se hizo cargo de Daringham Hall, todo han sido dificultades. Nadie confía en sus planes para renovar la mansión, y él sigue luchando día tras día contra nuevos imprevistos y rumores malintencionados. Solo su amor por Kate le da la fuerza necesaria para seguir adelante. Pero cuando incluso ella lo acusa de mentirle, Ben debe enfrentarse a una decisión radical…
Así finaliza la trilogía Daringham Hall, la obra con que se presenta a los lectores en castellano la alemana Kathryn Taylor, autora de varios best sellers que entraron en la prestigiosa lista de más vendidos de Der Spiegel.

-Resumen-
Ben no para de hacer cambios en Daringham Hall. Sabe que la única forma de que los Candem puedan seguir viviendo allí es usar la casa para generar el máximo beneficio, sobretodo a base de turismo, incluso está construyendo un café...Pero sus decisiones no gustan a los miembros más estirados de la familia y la presión de sus quejas y sus críticas están acabando con su paciencia.
David sigue en su búsqueda de sí mismo. Habiendo decidido ya dejar la carrera de empresariales quiere probar suerte heredando un nuevo trabajo: el de dueño de los salones de juego de su verdadero padre. Pero para eso tendrá que vivir en Londres, lejos de Anna, quien no puede estar un segundo separada de él...
Ambos tendrán que enfrentarse a nuevos retos y afrontar duros obstáculos. ¿Quién será capaz de superarlos?¿Quién se quedará al mando de Daringham Hall si esta sale de la bancarrota?

-Mi Opinión-
Si tuviera que definir este libro con una palabra esa sería "desastre". Prácticamente todo dentro de él me ha indignado y donde antes había giros interesantes aunque propios de un culebrón ahora hay topicazo tras topicazo absurdo y dramático que desembocan en una solución totalmente previsible.
Lo que más ha fallado en esta última entrega han sido los personajes. Sobretodo con los masculinos Kathryn Taylor se ha empeñado en que todos sean unos machotes agresivos egoístas que controlan absolutamente todas las situaciones y siempre se salen con la suya. Y si en algún momento la cagan pues piensan que han sido estúpido, van a buscar a la chica y ella está ahí esperando con los brazos abiertos. Ni sé cuantas escenas en las que el chico se enfada y rompe algo o se da a la bebida me he tenido que tragar.
Ben está obsesionado con proteger a Kate(y ella la verdad que no lucha por demostrarle que eso no debe de ser así) y a Peter le gusta ver como Tilly está solo para él sin comprometerse a nada ni devolverle el afecto.
Pero las chicas no se quedan atrás. Kate sigue super víctimista metiéndose en las decisiones de su novio y lloriqueando para conseguir lo que quiere. Incluso he tenido que asistir a una escena en la que cotillea los papeles de Ben y contestar a su teléfono cuando él no está para ver qué se trae entre manos.
Anna por otro lado sigue enfermizamente dependiente de David. Lo persigue a todos lados, rechaza buenas oportunidades de futuro para estar con él... Y él, que no hace lo mismo por ella, queda como el malo. Pues no señor, si ella ha decidido renunciar a su futuro por él es su problema y si él es más listo y prefiere aprovechar la oportunidad que además es totalmente compatible con estar con ella y con que ella aproveche su oportunidad pues me parece estupendo. Aunque poco tarda el chico en decepcionarme, se rinde al primer obstáculo y, como siempre "triunfa el amor"(que para estos dos es no separarse ni para ir al baño vaya...).
Y por último Jazz, que de repente, como se ha vuelto buena, ya no lleva el pelo teñido y está mucho más guapa. Como si llevar el pelo morado fuera símbolo de agresividad y mala vida...
En fin, que más decir, unas portadas muy bonitas y una historia original con algunos puntos muy buenos pero cargada de cosas previsibles y finalmente de estándares indignantes.

-Puntuación-