AUTOR: Minna Lindgren
NÚMERO DE PÁGINAS: 320
EDITORIAL: Suma de letras
SAGA: Autoconclusivo
-Sinopsis-
Durante más de una década Ulla, de setenta y cuatro años, ha cuidado de su marido impedido, un hombre mezquino y casi alcohólico. En el funeral, un único pensamiento ocupa su cabeza: ¡Por fin!
Desde ese momento retoma el contacto con viejos amigos y vive cada día como si fuera el último. Sus hijos, ya adultos, tratan de poner límite a su recién descubierto desenfreno, pero no están preparados para el desafío que está a punto de aparecer de la mano de un caballero de cierta edad...
-Resumen-
Ulla no ha podido disfrutar de la vida hasta que su marido no ha muerto. El matrimonio fue bastante distante, no hubo maltrato pero tampoco ningún tipo de amor. Por si eso fuera poco, durante los últimos doce años, ha tenido que cuidar a su marido, al cual una enfermedad impedía valerse por sí mismo. Ahora está dispuesta a dejar los malos tiempos atrás y empezar a vivir a los 74 años, siendo consciente de que cualquier día puede ser el último. Sin embargo, el mundo no deja de oponerle resistencia.
En primer lugar, sus hijos son incapaces de aceptar su situación. No comprenden que ahora se siente liberada y que puede vivir sola. Se mueven por el interés y la tratan como si fuera una persona incapaz, cruzando algunos límites sobre el control de su vida.
Por otro lado, se ve obligada a presenciar como muchas otras personas tienen un punto de vista parecido al de sus hijos. Sus prejuicios las mueven a tratarla como si le costase entender o llevar a cabo una vida normal.
Gracias a su grupo de amigos de siempre, con el cual no ha mantenido relación hasta este momento, redescubre la felicidad y mantiene la esperanza de ser totalmente libre e independiente.
-Mi Opinión-
Hace tiempo que tenía antojo de leer a Minna. Su famosa trilogía de Helsinki es bastante peculiar y sólo he oído cosas buenas acerca de ellas. Sin embargo, actualmente es un poco complicada de conseguir en papel así que cuando vi esta nueva aventura(del mismo estilo pero totalmente independiente) no pude dejarla escapar.
En Viuda, al fin, Ulla nos cuenta su día a día tras la muerte de su marido. No es que lo describa absolutamente todo, sino que nos explica cómo ve el mundo tras verse liberada de una dura carga que le ha acompañado toda la vida y cómo el mundo la ve a ella sólo por ser mayor. Es muy fácil encontrar detalles que te hacen sentirte cercano ya que todos los acontecimientos son bastante realistas. Sin embargo, estamos acostumbrados a verlos desde otro punto de vista y ponerse en la piel de Ulla es realmente gratificante. Te produce una sensación de comprensión y empatía que puede dejarte enganchada al libro, pese a que aparentemente no tiene una historia definida(con introducción, nudo y desenlace) sino un desarrollo de ideas. Como un diario bastante interesante.
No me suele gustar este tipo de novelas, en las que no sé muy bien a dónde va todo pero la verdad es que esta ha sabido escapar muy bien y dejar un final cerrado y satisfactorio. Me ha gustado mucho.
Los personajes están muy bien definidos y desarrollados. Cada uno juega muy bien su papel en la historia y su presencia sirve para ofrecer distintas perspectivas y aportar reflexiones y comportamientos a la historia. Es imposible no odiar a los hijos de Ulla pese a que son bastante realistas y, por desgracia, bastante comunes. Yo personalmente no soportaba las escenas de sus nietos(supongo que el que no me gusten los niños influye bastante). Son bastante revoltosos y, una vez más asemejándose a lo más común en la actualidad, su padre no les presta atención. A pesar de eso, sirven para despertar el lado travieso de Ulla, por lo que, como os comentaba, su presencia es importante.
Susanna es la otra hija de Ulla. Es la que más odio de los dos, no sé si soy yo, es normal o está hecho para ello. Desde el fallecimiento de su padre, habla con un cariño nunca visto a su madre, además de usar un tono más pausado y repetirle constantemente que si se acuerda de las cosas. Tiene un perro también muy revoltoso, con el que obliga a Ulla a quedarse cuando le conviene(su hermano hace lo mismo con los nietos de la mujer pero, al menos, a Ulla le gustan los chiquillos). Eso sólo me resulta irritante. Lo que me ha fastidiado y mucho es que, al final de la historia, la mujer se cansa/quiere-cambiar-de-vida-y él-no-entra-en-sus-planes del perro y decide sacrificarlo. ¿Estamos locos? Ya en otro punto de la historia se comenta esa opción si el dueño de la mascota muere, pero es sólo una opción y no se le da importancia. El problema de esta escena es que todo el mundo está de acuerdo en que como la mujer se ha cansado de él, sacrificarlo es una posibilidad totalmente aceptable. ¿En serio? Voy a abstenerme de comentar esta salvajada porque creo que todos tenemos en mente argumentos suficientes por lo que esto es indignante y no quiero que la reseña se me haga muy larga, pero que conste que la novela pierde muchos puntos por esto. No sé si será lo normal en otros países, pero lo que está claro es que hay más opciones y una mascota es una responsabilidad que hay que afrontar con todas sus consecuencias.
En resumen, una novela ágil y divertida, cargada de reflexiones bastante interesantes que recomendaría, pero cuya perspectiva sobre la vida de las mascotas me ha dejado con un mal sabor de boca.
Muchas gracias a Suma de letras por el envío
-Puntuación-
Hola!
ResponderEliminarNo conocía este libro, pero no me llama lo suficiente para querer leerlo y mi lista de pendientes es enorrrrme jeje
Besitos :)
Hola! No conocía este libro pero a verdad es que no me atrae su argumento así que lo dejaré pasar. Gracias por tu reseña.
ResponderEliminarUn saludo!
Hola
ResponderEliminarno conocía este libro, pero ya por el título me llamó la atención, tiene muy buena pinta, seguro que es una lectura divertidísima.
Un besín
Esta vez no me animo.
ResponderEliminarBesos.