TÍTULO: Una educación mortal
AUTOR: Naomi Novik
FECHA DE PUBLICACIÓN: Febrero 2021
NÚMERO DE PÁGINAS: 352
EDITORIAL: Umbriel
SAGA: La Escolomancia (1/3)
-Sinopsis-
Inaugurando una nueva trilogía, la autora superventas de “Un cuento oscuro” y “Un mundo helado” nos abre las puertas a una peligrosa escuela de magia donde cometer errores es sinónimo de una muerte segura… hasta que una chica empieza a reescribir las reglas del juego. Entra en una escuela de magia diferente a cualquiera que hayas conocido antes. En ella no hay profesores ni vacaciones, las amistades son pura estrategia y las probabilidades de sobrevivir nunca son las mismas. Cuando estás dentro, solo hay dos maneras de salir: o te gradúas o mueres. El Higgins está preparada como nadie para hacer frente a los muchos peligros de la escuela. Puede que no tenga aliados, pero posee una fuerza oscura lo suficientemente poderosa para elevar montañas y aniquilar a millones, por no mencionar que puede destruir fácilmente a los innumerables monstruos que merodean por ella. Solo que, accidentalmente, podría matar también al resto de estudiantes. Así que El está intentando con todas sus fuerzas no usarla… a menos que no tenga elección. Ingeniosa, mordaz y divertida, y también con un profundo sentido de la justicia, esta fascinante novela nos recuerda que hay cosas mucho más importantes que la mera supervivencia.-Mi Opinión-
Pese a la decepción que me llevé leyendo la saga "Temerario", sigo fiel a Naomi Novik. En Una educación mortal nos muestra un estilo que no habíamos visto hasta ahora (al menos, en España) mucho más adolescente, sarcástico y ligero.
Este mundo mágico que nos presenta es totalmente original e imprevisible, quedando lejos del aura de cuentos y leyendas que caracterizan a sus anteriores obras. Aquí, la magia proviene de "El vacío", un personaje en sí mismo que intercambia poder con los que tienen el don.
Este entorno alejado de la Tierra por una infraestructura en forma de pasillo es donde están situados nuestros personajes. Aislados por completo del mundo, estudian en un colegio conocido como "La Escolomancia" donde, durante los 4 años que dura el curso, no tienen forma de contactar con el exterior. A su llegada el primer año sólo pueden llevar una maleta con peso limitado, por lo que deben pensar con eficiencia y llevar sólo aquello que sea imprescindible y que, a ser posible, les sirva para los años que le quedan por delante.
La Escolomancia es un edificio redondeado que gira en sentido descendiente una vez al año, coincidiendo con la graduación de los estudiantes de último curso. Para salir, los estudiantes deben pasar por el vestíbulo por el que entraron, de manera que se ven obligados a combatir con los monstruos que el vacío alrededor ha convocado desde el año anterior.
De esta forma, el objetivo principal de los alumnos es aprender lo máximo posible y forjar relaciones que le resulten convenientes para conseguir ser los más preparados a la hora de luchar por volver a casa. Para ello, utilizan los intercambios, tanto de hechizos como de objetos fabricados por ellos mismos o incluso útiles que puedan necesitar en su día a día.
Pero la vida en La Escolomancia tampoco es nada fácil. Este lugar carece de adultos y abunda de monstruos, los cuales pueden aparecer de cualquier extracto de oscuridad. Las clases están automatizadas y los hechizos responden a los deseos, las necesidades o las capacidades de quien los quiere. Para conseguir uno, se debe pedir al vacío, el cual materializa el libro donde puedes aprenderlo en el idioma que entiende que es más necesario para tí (ojo, que no el más fácil). Una vez descubierto este conocimiento es conveniente intercambiarlo por otro que nunca se te proporcionaría a ti debido a tu naturaleza.
La magia procede del maná, el cual se saca de actividades (desde el propio ejercicio hasta cantar, pasando por hacer punto o sudokus), objetos y otros seres vivos. En este último caso, extraerlo de los humanos es complicado. Sin embargo, este poder se puede almacenar e incluso hay organizaciones que lo generan para incluirlo en una reserva conjunta y asegurarse de que todos puedan utilizarlo para proteger o estar protegidos.
Dicho todo esto, debo hablaros de los personajes principales. Si la ambientación ya os parece sumamente característica, la reflexión detrás de estos no se queda nada atrás. Por un lado, tenemos a Galadriel, nuestra protagonista. Pese a estar educada en la más absoluta bondad, su naturaleza la describe con lo que llaman una "Malefice", es decir, alguien con dones malignos, destinada a arrasar y dominar todo a su alrededor. Esto provoca que "el vacío" sólo le proporcione hechizos enfocados a sus dones, por lo que, aunque conozca los más destructivos y manipuladores, carece de los más básicos y sencillos, aquellos que realmente le ayudarían en su día a día.
Esta carencia, sumada a su frustración y su aura, tiene como consecuencia la marginación por parte de sus compañeros. No es útil para ellos ni tampoco les genera simpatía. Por poneros un ejemplo, carecer del conocimiento de hechizos básicos como son los de la higiene hace que su compañía no resulte agradable. No tener confianza con nadie implica que no tengas quien te vigile la espalda mientras te duchas por lo que no puedes permitirte hacerlo y esto, a su vez, aumenta las pocas posibilidades de acercarte a alguien.
Por otro lado tenemos a Orion. Él es el único que muestra un mínimo de interés por Galadriel, pese a ser el último que debería hacerlo. De padres ricos y poderosos, tiene el futuro asegurado una vez salga de la escuela y eso lo hace bastante popular. No obstante, su principal obsesión es combatir con los monstruos, tanto para salvar la vida de sus compañeros como para entrenarse para su futuro. Todo el mundo le admira por ello y se lo muestran día a día, con la pequeña excepción de Galadriel. Si ya de por sí su situación la hace estar enfadada con el mundo, presenciar tanto peloteo la pone enferma. Y esto, obviamente, es lo que a él más le atrae de ella, ya que esta actitud le libera de la presión que siente con el resto del mundo.
Este libro no tiene un villano declarado, una gran historia de amor ni un objetivo concreto pero es fascinante como todos estos elementos forman un mundo coherente. Con tantos peligros(a veces tantos que resulta un poco surrealista) parece que el reto es terminar el curso vivos. Una vez nos acercamos al final, todo lo sembrado sin aparente importancia empieza a florecer en escenas frenéticas y absorbentes que abren la puerta a sus continuaciones las cuales, en este punto, resultan totalmente imprevisibles.
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-Puntuación-
